jueves, 29 de marzo de 2012

He tenido una quesadilla...¡digo! Pesadilla...

Lo voy a escribir antes de que se me olvide, que los sueños siempre se me olvidan y no mola nada.

Os cuento. Iba yo en el coche de Maribel (una amiga) con mi prima Julia y unas amigas más. No me preguntéis como cabíamos todas, porque no lo sé.
Entonces... no recuerdo bien por qué.. la madre (que iba conduciendo el coche) nos decía que teníamos que ir a la casa maldita para ver que pasaba con la chiquilla de dentro. Julia, Maribel y yo nos negamos, pero las demás se animan y van (el coche se divide en dos mágicamente, o no sé como mierda funciona esto de la mitosis de coches). Al rato, nosotras pensamos que podrían estar en peligro, y decidimos ir.

Esto es como en las películas de miedo, cuando van a abrir una puerta.. y tu les dices.. nooo, no abráis la puerta, es maaalooo... pero la abren. Y mueren.

Total, que llegamos a la puerta de aquella casa maldita. Julia, Maribel y yo nos cogemos de las manos, y al ir a entrar, la casa nos absorbe.
Vamos avanzando por allí.. era todo super siniestro. De vez en cuando una de nosotras flotaba misteriosamente en el aire y se oía una risa perversa, proveniente de ningún sitio.
Y nos cagábamos toah, claro.

Llegamos al final... que conste que no recuerdo bien. Y allí estaba esa chica siniestra que supuestamente teníamos que investigar/salvar/saberquémierdapasa. Semoh unah cotishah. Y nos dice que, si queremos derrotar a los malvados que la tienen allí prisionera, entre los cuales está su padre, tenemos que atacar su punto débil.. y le susurró a Maribel cuál era. Y Julia y yo pues nos quedamos sin saberlo, que la muy mierda no nos lo quiso decir.

Y de pronto, aparecen los tipos estos (que son malos y tal) y nos llevan de prisioneras a nosotras.. y vamos a parar a una sala que, supuestamente es un juzgado, pero vamos... es una habitación con muchas sillas dispuestas en forma de círculo, para qué nos vamos a engañar. Ahí nos encontramos a las amigas que perdimos de vista antes (Natalia, Helena, Marina...) y Maribel comenzó a decirle a todos cuál era el punto débil de ellos para, en un momento dado, levantarnos y atacarles. Pero a Julia y a mí nos tiene manía o algo, porque tampoco nos lo dijo.
Y había buenorros capturados también... yo estaba más pendiente de eso que de otra cosa.

Y total, que me desperté. Si habéis llegado hasta aquí leyendo, sois dignos de admirar... porque vaya paranoia mierdosa que os acabáis de leer. Y nada, me voy a matar sims. ¡Saludos!

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